Las ultimas cartas de Hitler

Entre los miles y miles de rollos de películas sin clasificar de las cuales reviso, restauro y clasifico todos los días, encontré una “pieza” que me llamo la atención sobre todo porque se hallaba en estado de descomponerse y logre salvarla. Se trata de una documental sobre la vida real, en 35 mm nitrato en blanco y negro con 25 minutos, 20 segundos sobre el testimonio de las últimas cartas que mandaron los soldados alemanes en el frente de batalla ruso a sus parientes en Alemania, las cuales nunca llegaron a destino por orden de Hitler. ¿Cuál fue el motivo? La situación era desesperante en Estalingrado. La guerra estaba perdida. Las bajas en vida eran cuantiosas. Los soldados en sus misivas comentaban estos acontecimientos. Y el temor de que llagara a saberse entre el pueblo aleman traería más desencanto y deserciones. ¡Las cartas nunca debían llegar…!

Cuando el aeródromo alemán de Estalingrado, quedó al alcance de las armas ligeras soviéticas, se tuvo la certeza de que cualquier despegue podría ser el último. Los últimos aviones en salir de Estalingrado fueron tres: Dos Heinkel 111, que llevaban las cartas, y un Junkers 52 cargado de heridos. Las sacas de correo no sólo incluían las últimas cartas, sino todas las escritas en meses anteriores, pues desde el cerco no existía un correo de campaña regular con el exterior. Muchos años después se tuvo hechos y cifras concretas de este acontecimiento:

1. Las cartas, en número de 250.000 fueron halladas en un avión al término de la guerra.
2. Las cartas fueron halladas en 1954 en los archivos del ejército, con las direcciones y los remites censurados.
3. Sólo se encontraron extractos de las cartas.

Las sacas fueron confiscadas por el Ministerio de Propaganda a fin de realizar una selección con vistas a un libro que mostraría al pueblo alemán el valor, la abnegación y el patriotismo de los defensores de Estalingrado, ya que su rendición había supuesto una catástrofe nacional. La lectura de las primeras cartas, en las que sus autores, expresándose libremente al conocer su destino, cuestionaban al Estado Mayor y al mismo Hitler por la dirección de la campaña hizo inviable el proyecto. Las cartas fueron destruidas por orden de Goebbels.

El Estado mayor utilizó el material de las cartas para redactar un informe sobre la moral de combate de los soldados en Estalingrado con los siguientes resultados: la mitad de las cartas demostraba una "actitud negativa y desleal" hacia el mando, a un tercio le era indiferente y únicamente el 2% aprobaba la dirección de la campaña.

El film muestra todos estos acontecimientos y además combates en las trincheras, masacre de soldados, bombardeos de artillería pesada. Soldados alemanes en las últimas “consecuencias” y otros hechos lamentables.

Siempre pienso que todo debe saberse y verse. El cine como espejo de la vida es el gran testigo de la historia.

Roberto Di Chiara